Limpieza y mantenimiento de las estufas eléctricas: maximiza su rendimiento
Un correcto mantenimiento de tu estufa eléctrica no solo prolongará su vida útil, sino que también te ayudará a ahorrar energía y a mantener un ambiente saludable en tu hogar.
Cómo limpiar una estufa eléctrica
Antes de limpiarla, asegúrate de que está apagada, desconectada y fría. Los pasos a seguir son bastante sencillos en estos sistemas de calefacción:
- Exterior: limpia el exterior con un paño suave y húmedo. Evita usar productos abrasivos.
- Rejillas: si la estufa tiene rejillas, límpialas con regularidad para evitar la acumulación de polvo u obstrucciones.
- Interior: si el modelo lo permite, limpia el interior con un aspirador para eliminar el polvo acumulado.
Revisiones periódicas
Comprueba visualmente cada día el estado de los cables y los sistemas para apagarse automáticamente en caso de posibles daños. Esto garantizará un uso seguro de tu estufa eléctrica.
También debes examinar el estado de las juntas, pues después de varios meses de uso continuo, es habitual que estas piezas pierdan estanqueidad y es momento de reemplazarlas.
Utiliza termostatos
Muchos modelos disponibles en Repsol cuentan con termostatos integrados, así como sistemas programables para un uso optimizado del aparato. Si no es el caso de tu sistema de calefacción, adquirir un termostato inteligente para que puedas regular el calor y mantenerlo a una intensidad te ayudará a controlar su gasto, sin perder su potencia calorífica.