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El microondas se ha convertido en un electrodoméstico indispensable en la mayoría de los hogares. Su rapidez y comodidad para calentar y cocinar alimentos lo hacen muy atractivo, pero ¿alguna vez te has preguntado cuánto consume?
En este artículo te explicamos cómo calcular el gasto energético de este electrodoméstico y te damos algunos trucos para reducir su consumo y, por tanto, tu factura de la luz.
¿Cuánto consume un microondas al mes?
El consumo de energía de este electrodoméstico depende de varios factores, como la potencia del aparato, el tiempo de uso y el tipo de programa seleccionado. Para calcularlo, debes tener en cuenta estos factores. Sin embargo, para conocer el consumo aproximado se utiliza esta fórmula:
Consumo (kWh) = (Potencia (W) x Tiempo de uso (h)) / 1000
Por ejemplo, un microondas promedio con una potencia de 800 vatios usado 15 minutos al día consume alrededor de 0,2 kWh al día y 6 kWh al mes, lo que equivale en la factura a 0,024 euros al día y 0,72 euros al mes si el precio que se paga por kWh es 0,12 €. Sin embargo, varía dependiendo de la tarifa eléctrica.
¿Cuántos watts consume un microondas?
La potencia típica de este electrodoméstico varía entre 600 y 1500 vatios (W). Esto significa que, en solo una hora de uso, un microondas de 1000 W puede consumir 1 kWh.
Sin embargo, su uso suele ser más breve, lo que reduce el gasto. Aun así, es importante tener en cuenta su impacto en la energía eléctrica. Si este microondas se utiliza 10 minutos al día (0,16 horas) tendría un consumo diario de:
(1000 W x 0,16 h) / 1000 = 0,16 kWh
Es decir, esos 10 minutos consumen unos 160 W.
¿Cuánto consume el microondas enchufado?
A este consumo en funcionamiento, hay que añadir el que realiza el microondas cuando está apagado, pero conectado a la corriente, lo que se conoce como consumo fantasma o en stand-by. Este consumo es mínimo, alrededor de 13 o 14 kWh al mes, es decir, entre 1,56 € o 1,68 € (calculado con el precio de 0,12 € el kWh) al mes, que a lo largo del año puede suponer un gasto innecesario.
Para evitar este gasto energético, lo mejor es desenchufar el microondas cuando no lo estés utilizando o usar enchufes inteligentes o regletas con interruptor.
Consumo de microondas según su tipo
No todos los microondas consumen lo mismo. Según el tipo que sean su eficiencia energética varía:
- Con grill: incorporan una resistencia que permite gratinar y dorar los alimentos. Son más versátiles, pero también consumen más energía.
- Sin grill: son los modelos más básicos y económicos. Su consumo energético es menor que los anteriores.
- Con función de convección: son aún más potentes, ya que combinan microondas y ventiladores para cocinar como un horno.
- Con tecnología inverter: esta tecnología permite regular la potencia de forma más precisa, lo que se traduce en un menor consumo de energía y un calentamiento más uniforme de los alimentos.
¿De qué depende el consumo del microondas?
Como hemos visto, el consumo de energía de este tipo de electrodomésticos no es una cifra fija, sino que depende de varios factores:
- Potencia: a mayor potencia, mayor será el consumo energético. Sin embargo, un microondas más potente calentará los alimentos más rápido, lo que podría compensar su mayor consumo.
- Empleo de funciones adicionales: utilizar la función de grill o la convección pueden aumentar significativamente el consumo de energía del aparato.
- Eficiencia energética del electrodoméstico: se detalla la capacidad que tiene de realizar sus funciones usando la menor cantidad de energía posible. Al comprar un nuevo microondas, es recomendable elegir un modelo con una etiqueta de eficiencia energética A+++.
- Tipo de programa seleccionado: estos pueden tener consumos energéticos distintos. Por ejemplo, los programas de descongelación suelen consumir menos energía que los de cocción a máxima potencia.
- Cantidad de alimento: calentar una taza de leche no consume lo mismo que calentar un plato de comida para dos personas.
- Temperatura inicial del alimento: si lo que se va a calentar está congelado, el microondas necesitará más tiempo y energía.
- Estado del microondas (limpieza y mantenimiento): la suciedad y los restos de comida pueden absorber energía, reduciendo la eficiencia del aparato. Además, si el microondas tiene algún problema técnico, podría consumir más energía de la necesaria.
Consumo del microondas frente a otros aparatos de cocina
Comparado con otros electrodomésticos, el microondas suele ser más eficiente en términos de consumo de energía. Si te interesa conocer más sobre el consumo de energía de otros aparatos, puedes consultar este artículo sobre qué electrodomésticos consumen más.
¿Qué consume más el microondas o la vitrocerámica?
La vitrocerámica consume más energía, ya que necesita un tiempo más prolongado para alcanzar temperaturas adecuadas. Si bien el microondas utiliza mucha potencia, la rapidez con la que calienta hace que su consumo sea menor.
¿Qué consume más el microondas o el horno?
El horno tradicional es uno de los electrodomésticos que más energía consume. Un horno eléctrico estándar consume alrededor de 1,5 kWh de uso continuo. Para obtener una visión más detallada, puedes leer este artículo sobre cuánto consume un horno.
¿Qué consume más el microondas o la freidora de aire?
El consumo de la freidora de aire y el microondas es similar. Aunque la airfryer puede ser más eficiente para cocinar ciertos alimentos de manera uniforme, el microondas sigue siendo más rápido en muchas tareas, como calentar o descongelar.
Trucos para reducir el consumo de tu microondas
Estos son algunos consejos para minimizar el impacto de tu microondas en tu factura de la luz:
- Utiliza el microondas solo cuando sea necesario.
- Ajusta el tamaño de las porciones a la capacidad del microondas: parte los alimentos más grandes y distribúyelos por el plato para que se caliente más rápido y de manera uniforme.
- Escoge el programa más adecuado para cada tipo de alimento y evita usar el microondas a máxima potencia si no es necesario.
- Desenchufa el microondas cuando no lo uses: evitarás el consumo en stand-by.
- Mantén el microondas limpio y en buen estado.
- Utiliza recipientes aptos para microondas: los de vidrio o cerámica retienen mejor el calor y permiten cocinar más rápido.
- Aprovecha el calor residual: si apagas el microondas unos segundos antes de que termine el tiempo programado, puedes dejar que el calor residual termine de cocinar los alimentos.
- Descongela los alimentos a temperatura ambiente o en la nevera: sin necesidad de usar el microondas. Lleva más tiempo, pero te permite ahorrar energía.
Siguiendo estos consejos, podrás reducir el consumo de tu microondas y contribuir al ahorro en tu factura de la luz.
Cada acción que tomas cuenta, tanto en este electrodoméstico como en todos los que tienes en tu vivienda. Si quieres saber más sobre el consumo energético de tu hogar, te recomendamos este artículo sobre cuántos kWh consume una casa.