En la búsqueda de soluciones óptimas para calentar el agua en tu hogar, es esencial que conozcas las diferencias entre las calderas de gas, los calentadores de gas y los termos eléctricos. Estos sistemas tienen características y ventajas propias que pueden hacerlos más adecuados en función de tus necesidades y circunstancias.
Nuestro objetivo es proporcionarte la información necesaria para que tomes la mejor decisión. En este post te ayudamos a entender el funcionamiento de cada sistema, su eficiencia energética y los factores que debes tener en cuenta antes de elegir el más conveniente para tu hogar.
Las calderas de gas son una de las soluciones más completas para el hogar, ya que pueden cubrir tanto las necesidades de calefacción como de agua caliente sanitaria.
El gas, ya sea propano o butano, se utiliza para calentar agua en un circuito cerrado que, posteriormente, se distribuye a los radiadores y a los puntos de consumo de agua caliente de la vivienda.
Este es un sistema altamente eficiente. En el caso de las calderas de condensación, aprovechan el calor de los gases de la combustión para precalentar el agua y conseguir un rendimiento superior al de las calderas convencionales.
Las calderas de gas tienen varias ventajas que las hacen una opción muy atractiva:
Un calentador de gas, a diferencia de la caldera, se dedica exclusivamente a proporcionar agua caliente sanitaria. Su funcionamiento se basa en la circulación del agua por un serpentín que está en contacto con el quemador de gas.
Las características específicas de un calentador de gas, como su potencia, su capacidad de suministro de agua caliente y su eficiencia energética, dependerán del modelo.
Varias son las ventajas de los calentadores de gas respecto a otros sistemas:
Un termo eléctrico es un dispositivo que utiliza la electricidad para calentar agua. Al igual que el calentador de gas, está diseñado para proporcionar agua caliente sanitaria, no para la calefacción.
Respecto a su funcionamiento, el elemento calefactor se activa cuando la temperatura del agua en el depósito es menor al del termostato. Una vez que se alcanza esta temperatura, se apaga automáticamente.
Estos son los beneficios más destacados de los termos eléctricos:
Escoger entre una caldera, un calentador de gas o un termo eléctrico depende de varios factores, como el espacio disponible, la necesidad de agua caliente, el presupuesto y la disponibilidad de una instalación de gas.
Las calderas resultan ideales para casas grandes con varias personas, ya que pueden suministrar agua caliente y calefacción de manera eficiente. Por su parte, los calentadores de gas son más adecuados para hogares pequeños o en zonas de clima cálido, donde la calefacción no es necesaria. Por último, los termos eléctricos se convierten en la mejor alternativa cuando no dispones de gas y no te importa esperar a que el agua se caliente.
Para calcular el gasto en euros de una caldera de gas, calentador de gas y termo eléctrico, vamos a tomar como referencia un precio medio de la energía de 0,12€/kWh. Hay que tener en cuenta que el consumo depende de la potencia que se tenga contratada, del tiempo de funcionamiento y de otros muchos factores. Los resultados estimados de consumo son los siguientes:
Es importante tener en cuenta que estos valores son solo una estimación, ya que el gasto real varía dependiendo de factores como la eficiencia energética de los dispositivos, la tarifa contratada y el número de horas de uso.
En resumen, la elección entre caldera de gas, calentador de gas o termo eléctrico dependerá de tus necesidades, del espacio disponible y de tu presupuesto. Las calderas son ideales para grandes hogares, los calentadores resultan adecuados para espacios pequeños o climas cálidos y los termos eléctricos son la mejor opción si no se dispone de gas. Recuerda que en Repsol te ofrecemos alternativas tanto para el gas como para la electricidad.
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