Los aceites son fundamentales para el buen estado del motor, ya que reducen la fricción en sus componentes internos. Precisamente, son la base de un adecuado mantenimiento y debe cambiarse cuando sea necesario. Por norma general, cada 15.000 kilómetros, pero ¿qué sucede con los aceites long life? ¿Son una buena opción?
Como siempre recomendamos, hay que escoger los mejores productos para el vehículo. Este tipo de aceite es, de hecho, uno de ellos. Pero debes saber que no siempre es aconsejable. Depende de cuál sea tu automóvil. En este artículo desvelamos las claves y te explicaremos en qué se diferencia de otros tipos.
Es un tipo de lubricante que se caracteriza por una resistencia significativamente mayor al paso del tiempo. Mantiene un nivel inferior de viscosidad a altas y bajas temperaturas, lo que es muy útil en zonas de clima extremo. De igual modo, sus puntos de inflamación y congelación suelen rondar los 180°C y los -42°C, respectivamente.
Con el objetivo de preservar sus propiedades durante más tiempo, tienen una densidad mayor. Suele rondar los 0,854 gramos por litro, lo que se traduce en un índice de viscosidad superior a 155. Cuanto más estable sea esta última cifra, más tiempo se mantendrá el motor lubricado. Esta es otra de las razones que justifican su mayor duración y lo hacen más rentable.
En cuanto a su funcionamiento, destaca por ofrecer un excelente rendimiento en frío. Está pensado para mantener su fluidez y la adherencia con el motor, incluso a bajas temperaturas. Como consecuencia, el mantenimiento (que no las revisiones) se puede dilatar en el tiempo de manera significativa.
La principal diferencia frente a otros aceites es que pueden resultar hasta el doble de eficaces que los convencionales. Se estima que pueden soportar un recorrido acumulado de hasta 30.000 kilómetros. Con un uso habitual, puedes usarlo dos años antes de tener que hacer el cambio en el taller.
Hay productos que pueden contar con hasta 50.000 kilómetros de durabilidad. Eso sí, suelen estar diseñados para vehículos de gama alta y marcas como BMW o Volkswagen. Otra de sus diferencias es que pueden conservar el motor en mejores condiciones (siempre y cuando haya sido desarrollado para este formato).
Como te puedes imaginar, resultan algo más caros, pero pueden ser una inversión a corto y medio plazo. Para comprobar sus cualidades, suelen someterse a más pruebas que los convencionales.
Puedes utilizarlo si tu coche tiene un motor moderno de gasolina o diésel del grupo VW-Audi-Seat-Skoda. En Repsol podrás comprar online el aceite Elite Long Life 5w30, válido también en vehículos que requieran un nivel de calidad ACEA C2.
Hay que tener en cuenta que el filtro debe estar preparado para un uso más dilatado en el tiempo. Los que vienen de serie con el automóvil, en su mayoría, están pensados para su utilización durante un año. Lo más habitual con este aceite es que aumente hasta los dos, por lo que siempre debes consultar el manual del fabricante.
Como has podido ver, los aceites long life son un recurso idóneo para tu vehículo. Equípalo siempre con compuestos de calidad y aumentarás su vida útil mientras reduces la necesidad de mantenimiento.
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